Durante la alabanza yo le digo “Señor te amo....Has de mi lo que quieras, heme aquí, eres lo mas importante para mi y Dios dice, “déjame probar si es cierto, dame tu ofrenda” entonces El mira el proceso en tu corazón y tu dices: te daré algo y Dios dice yo no quiero algo, yo quiero lo que te estoy pidiendo.
Abel no predico, no resucito muertos, no hizo campañas de milagros...pero Abel aparece entre los hombres que después de muertos aun su ofrenda habla. Porque a Dios no le impresiona tu diezmo sino tu obediencia.
Dios quiere un holocausto que el humo de tu ofrenda suba.
Profeta Yalile Díaz
***ESTO FUE SACADO DE LA PAGINA DANCING FOR THE LORD EN FACEBOOK***
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